Por Ramiro Diaz
El mundo del fútbol argentino se vio sacudido por un cruce de palabras entre el presidente de Boca Juniors, Juan Román Riquelme, y un periodista de ESPN. El episodio, que tuvo lugar durante una entrevista, generó un intenso debate en los medios y en las redes sociales.
Todo comenzó cuando el periodista de ESPN le sugirió a Riquelme que "prendiera la tele" en referencia a ciertas noticias que, según el presidente xeneize, habían sido omitidas en el programa. Esta sugerencia no cayó nada bien en Riquelme, quien se levantó de la entrevista de manera abrupta.
En diálogo con el podcast Factos, el periodista involucrado en la polémica defendió su postura y aseguró que "no se hace eso". Según sus palabras, "si un invitado se te levanta de un móvil la culpa es del periodista". El comunicador también expresó su enojo por la actitud de Riquelme y aseguró que todo lo que había dicho durante la entrevista era cierto.
Las declaraciones del periodista generaron una gran cantidad de reacciones en las redes sociales. Muchos usuarios se mostraron a favor de la postura de Riquelme, argumentando que el periodista había sido irrespetuoso. Otros, en cambio, defendieron al periodista y criticaron la actitud de Riquelme.
La pregunta que surge a partir de este episodio es: ¿quién tiene la razón? Por un lado, Riquelme tiene derecho a sentirse ofendido si considera que el periodista ha sido injusto con él. Por otro lado, el periodista también tiene derecho a defender su trabajo y a expresar su opinión.
Es importante destacar que, en el periodismo deportivo, la relación entre los periodistas y los protagonistas del fútbol es fundamental. Los periodistas tienen la responsabilidad de informar de manera objetiva y veraz, pero también deben ser respetuosos con las figuras del fútbol. Por su parte, los futbolistas y dirigentes deben estar dispuestos a responder preguntas y a dar explicaciones, incluso cuando las preguntas no sean de su agrado.
Este tipo de episodios pueden tener consecuencias negativas para ambos protagonistas. Por un lado, Riquelme puede verse perjudicado si su imagen se ve afectada por este tipo de incidentes. Por otro lado, el periodista también puede sufrir las consecuencias si sus declaraciones generan una gran polémica.
El cruce entre Riquelme y el periodista de ESPN es un claro ejemplo de cómo la tensión puede surgir en las relaciones entre el periodismo deportivo y el mundo del fútbol. Es fundamental que ambas partes trabajen en conjunto para construir una relación más sana y respetuosa.
21/12/2024
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