Tras el Superclásico, la increíble maldición que logró romper el Boca de Ibarra

Boca está teniendo una de las semanas más movidas de todo el año, pero en este caso reina la euforia y la alegría. El Xeneize viene de ganar el Superclásico ante River Plate y ya es el segundo triunfo consecutivo ante el Millonario, el anterior había sido por la Copa de La Liga Profesional, que finalizó 1-0, con gol de Sebastián Villa en el Monumental.

Con esta victoria, el Xeneize trepó posiciones en el Torneo Local y dejó a River sobre la cuerda floja. Sin embargo, la alegría del vestuario no quedó ahí, sino que Boca se pudo imponer ante Lanús durante la noche del día miércoles y cosechó otros tres puntos que lo dejaron como único líder de la Liga Profesional.

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El partido ante el Granate no fue nada fácil para Boca, que le costó mucho encontrar un buen funcionamiento que le permita crear jugadas peligrosas. Sin embargo, una gran jugada protagonizada por Alan Varela, Frank Fabra y finalizada por Darío Benedetto, le dieron el ansiado triunfo, triunfo que rompió con una racha totalmente impresionante.

La maldición que rompió Boca al ganarle a Lanús

La victoria ante el Granate es más importante de lo que parece y te contamos por qué. Con este triunfo, el Xeneize rompió una racha que es poco creíble pero que hasta el día miércoles, era una realidad. La última vez que Boca había ganado de visitante, luego de ganar el clásico contra River, fue en el año 1974, cuando el cuadro azul y oro venció a Estudiantes 1-0 en La Plata por el Torneo Nacional 1974. Un dato totalmente increíble.