Con Figal y Rojo lesionados, la única esperanza que le queda a Ibarra en defensa

Que Boca se encuentre peleando el campeonato y siendo el único puntero tiene un mérito gigante que pocos de nosotros logró percatarse de dicha situación. Y es que el equipo se encuentra, sin restarle méritos a Hugo Ibarra, con un entrenador interino que hace 4 meses que asumió y además cuenta con un plantel corto plagado de lesiones.

Y es que el DT en ningún momento de la temporada pudo repetir equipo a causa de las reiteradas lesiones. Hoy lo que más sufre Boca son sus ausencias en defensa y sobre todo la de su zaga central titular: Marcos Rojo y Nicolás Figal. Ambos se habían convertido en la pareja perfecta, dejando sin chances a los delanteros de River en el clásico, sin embargo, pasará mucho tiempo hasta que los volvamos a ver juntos.

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Ya de por sí, nuestro capitán estará fuera de las canchas todo el primer semestre del 2023 y esto impedirá volver a ver dicha dupla por un largo tiempo. Lo de Figal no es tan grave, e incluso habría chances de que se recupere antes de que finalice la temporada. Sin embargo, lo cierto es que Ibarra deberá arreglarse con lo que tiene y ya tiene a su principal guerrero.

Gabriel Aranda, el único que puede salvarnos en defensa

Quien iba a decir que un pibe de 21 años de la Reserva es nuestra gran esperanza en la línea defensiva. Y es que el joven zaguero central demostró tener las condiciones necesarias para ser titular en Primera y ante el pésimo nivel tanto de Carlos Zambrano como de Facundo Roncaglia, Aranda es el único jugador capaz de salvarnos de este lío en defensa.