Fin de una era: el referente que se iría de Boca y no es Frank Fabra

El panorama de Sergio Romero en Boca Juniors cambió drásticamente en las últimas semanas. A pesar de que en un principio la idea de Fernando Gago era contar con él como una pieza clave del equipo, hoy la realidad es muy diferente. Con la llegada de Agustín Marchesín y su consolidación como titular, el futuro del arquero de 37 años parece estar cada vez más lejos del Xeneize.

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Gago quería recuperar a Romero, pero todo cambió

Según informó el periodista Diego Monroig en ESPN, la intención inicial de Gago al asumir en Boca era recuperar a Romero, sin importar la opinión de los hinchas ni el cruce que el arquero tuvo con los fanáticos en el último Superclásico. Sin embargo, el escenario actual ya no es el mismo.

La incorporación de Marchesín, sumada a su buen rendimiento en los partidos que disputó, modificó la planificación en el arco de Boca. El exjugador del Porto llegó para competir por un puesto, pero terminó adueñándose del lugar. Esto dejó a Romero en un papel secundario y con serias dudas sobre su continuidad después de mitad de año.

¿Romero se va de Boca en junio?

Si bien todavía no hay una decisión oficial, todo indica que el ciclo de Chiquito en Boca podría llegar a su fin en los próximos meses. La falta de continuidad y el alto salario del arquero generan incertidumbre dentro del club, que evalúa una salida de común acuerdo tras el mes de junio.

Romero llegó a Boca en 2022 como un refuerzo de jerarquía para el arco, pero su rendimiento estuvo marcado por altibajos. A pesar de haber sido clave en la Copa Libertadores 2023, donde atajó penales decisivos, su nivel en la última etapa no terminó de convencer a todos. Además, su relación con los hinchas se tensó tras el cruce que tuvo con la gente en el Superclásico en La Bombonera.

La decisión final, en manos de Boca y Romero

Con un contrato vigente hasta diciembre de 2025, la decisión final sobre su continuidad dependerá tanto del club como del propio jugador. En caso de que ambas partes lleguen a un acuerdo, su salida en junio sería prácticamente un hecho.

Por ahora, la prioridad de Gago es mantener la estabilidad en el equipo y consolidar a Marchesín como titular. En este contexto, Romero deberá evaluar qué es lo mejor para su futuro, ya que difícilmente recupere su lugar en el once inicial.

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A medida que se acerque la mitad del año, la situación de Chiquito Romero en Boca tomará más claridad. Lo cierto es que, hoy por hoy, su continuidad en el Xeneize está más en duda que nunca.